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REGALOS PERSONALIZADOS

viernes, 12 de marzo de 2021

Lo que se desayuna en mi casa

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Lo que hace unos años eran cien gramos ahora son setenta gramos. Me refiero al Lomo Extremadura Argal envasado en una bandeja tamaño plato, con su parte superior transparente y su base en color negro. Bonito envasado. El lomo muy rico. Pero la cantidad es tan escasa que, si no compras dos bandejas, no te llega ni para probar.

Es una pena que no venga más cantidad en una bandeja. A mí me gusta mucho este lomo para poner para picar cuando nos juntamos en mi casa familiares y/o amigos. Ves una película y vas comiendo algo de lomo para darle alegría al estómago.

La alegría no sale muy barata. Cada bandeja cuesta 1,99 euros. Y son sólo 70 gramos. Compras dos bandejas y gastas cuatro euros en nada. Es un fiambre carísimo. El kilo te sale a 18,57 euros. Ni que fuera caviar.

Pese a todo os lo recomiendo. Lo encuentras a vender en la sección de charcutería envasada de todos los supermercados y grandes superficies. Argal es una marca famosa que cada día se está haciendo más cara. Yo tuve la suerte de encontrar este Lomo de Extremadura con un descuento del setenta por ciento en la segunda unidad. Llevé la segunda bandeja por 60 céntimos. Ojalá hubiera oferta todas las semanas.

El lomo es sabroso, muy curadito, pero con un punto de jugosidad. Suelo hacer unos pinchos con pan para estirar una bandeja para muchos. Si les pones el lomo tal cual en la bandeja lo come solo una persona. Es adictivo. Las lonchas están cortadas finitas. Me gusta el corte. El lomo cuanto más finito lo cortas más rico está.

A mis hijas, en cambio, no les gusta el lomo cortado de ninguna manera. El chorizo lo comen, pero el lomo es imposible para ellas. Por más que les digo que sale de los cerdos alimentados de manera tradicional siguen sin aceptar un bocadillo de lomo. El lomo no es para niños y niñas. Estoy convencida mirando como mis niñas se niegan a comerlo.
2
Mis mañanas son muy ligeras gracias a la Leche sin Lactosa Puleva. Puedo tomar media botella sin que mi estómago proteste. Por fin he encontrado una leche sin lactosa ligera de verdad. La compro siempre desnatada. La semidesnatada no me desagrada, pero prefiero que tenga cero grasa. Todo lo que no engorda no suma gramos en la báscula del baño.

No es cara. La botella de un litro cuesta 89 céntimos. Es una botella llamativa por la publicidad que lleva en el envase. Cierra con un tapón de rosca ancho. La anchura del cuello de la botella facilita que la vacíes rápido en un cazo para calentarla por la mañana. Los amigos de Puleva han pensado con este diseño en las mujeres y hombres que andamos a cien por hora a primera hora del día. Quitas el tapón, inclinas la botella y la botella queda vaciada.

Esta leche sin lactosa de Puleva tiene menos grasa que las leches sin lactosa de la competencia. También tiene más vitaminas. Es una leche pensada para personas a las que nos gusta cuidarnos por medio de una alimentación adecuada a nuestras circunstancias.

Os la recomiendo. La leche sin lactosa de Puleva es una leche que vale para toda la familia. Mi marido no tiene intolerancia a la lactosa y la toma sin protestar en el café. Sola le cuesta un poco. A mí también. A la intolerancia a la lactosa le sumo lo poco que me gusta el sabor de la leche sin lactosa del montón. Esta leche sin lactosa de Puleva me sabe mejor, pero no tan bien como para tomarla sola, sin café. Con café es deliciosa. También está rica con té. Pese a ser mejor que otras leches sigue teniendo un sabor muy dulzón. Se explica porque le añaden lactasa; así ya no tenemos lactosa, sino que tenemos galactosa y glucosa, que son bastante más dulces que la lactosa.


PRUEBA PRIMERO, PAGA DESPUÉS