El Real Café Bernabeú suele ser nuestro sitio de encuentro con amigos cuando vamos a ver al Real Madrid. Resulta muy cómodo porque dispone de cafetería, restaurante, terraza, bar de copas.
A mí me gusta mucho para ir a desayunar cuando ando por Madrid. Me subo a su última planta y me pido un zumo natural con tapa de tortilla. También tienen bollería, tostadas, café,... Por unos cinco euros me sale mi desayuno aperitivo.
Cuando voy con mi marido y con los amigos nos decantamos por el tapeo o bien por pedir alguna ración de pescado o carne. Alguna vez pedimos el menú de cuchara. No sale excesivamente caro y lo puedes degustar con unas vistas preciosas al estadio. A mi niña le gusta mucho el menú infantil que ofrecen en el restaurante. Todo un detalle para padres y madres con niños pequeños.
Es, pues, un local muy cuidado. La decoración es moderna, las vistas preciosas, no abusan de decoración merengue... Me parece ideal para ir con niños. Patricia siempre quiere ir a este café y eso que ella no es nada futbolera.
La única desventaja que le encuentro es el tamaño de las raciones. Si vas con hambre, sales hambrienta, a no ser que abras la cartera y pidas un par de raciones más. Las raciones de este café famoso son como las tapas de los bares familiares.
Bueno, están bien para personas que no quieran engordar. Comes bien y en poca cantidad.
Del personal sólo puedo decir maravillas. Son muy profesionales y muy amables, muy detallistas con los niños. Y eso yo lo valoro mucho. Me gusta que los camareros tengan paciencia con mis niñas y no les pongan mala cara.
A mí me gusta mucho para ir a desayunar cuando ando por Madrid. Me subo a su última planta y me pido un zumo natural con tapa de tortilla. También tienen bollería, tostadas, café,... Por unos cinco euros me sale mi desayuno aperitivo.
Cuando voy con mi marido y con los amigos nos decantamos por el tapeo o bien por pedir alguna ración de pescado o carne. Alguna vez pedimos el menú de cuchara. No sale excesivamente caro y lo puedes degustar con unas vistas preciosas al estadio. A mi niña le gusta mucho el menú infantil que ofrecen en el restaurante. Todo un detalle para padres y madres con niños pequeños.
Es, pues, un local muy cuidado. La decoración es moderna, las vistas preciosas, no abusan de decoración merengue... Me parece ideal para ir con niños. Patricia siempre quiere ir a este café y eso que ella no es nada futbolera.
La única desventaja que le encuentro es el tamaño de las raciones. Si vas con hambre, sales hambrienta, a no ser que abras la cartera y pidas un par de raciones más. Las raciones de este café famoso son como las tapas de los bares familiares.
Bueno, están bien para personas que no quieran engordar. Comes bien y en poca cantidad.
Del personal sólo puedo decir maravillas. Son muy profesionales y muy amables, muy detallistas con los niños. Y eso yo lo valoro mucho. Me gusta que los camareros tengan paciencia con mis niñas y no les pongan mala cara.
