No quiero otra muñeca que no sea
una Barbie cabalgando un potro,
me dice mi hija cuando escribe
la carta a los Reyes que no somos.
Le miro el precio al juguete
y contesto un sí, yo te lo compro.
La niña sonríe sin saber
que una Reina Maga se lo compra.
Aquí les dejo a ustedes
el link donde pueden comprar otra
muñeca que cabalga su caballo
con casco y pelo siempre rubio: