Las pastillas de chupar Strepsils las compro siempre con sabor miel y limón. He probado estas pastillas en otros sabores y he llegado a la conclusión que mis favoritas son las de miel y limón.
Las de menta como que las encontraba muy fuertes en sabor. Las compro a veces porque le gustan a mi madre.
Las Strepsils las venden en cajas de 24 pastillas. Si tomas las ocho que te recomiendan como dosis máxima al día, poco te cunde la caja. Yo nunca tomo tantas. Con tres o cuatro tengo suficiente para aliviar unas molestias de garganta leves.
De precio no salen muy baratas, más bien nada baratas. La última caja que compré me costó 4,95 euros.
Os recomiendo las pastillas de chupar Strepsils porque son realmente efectivas para aliviar un dolor de garganta que está empezando. Yo nunca las he tomado más de dos o tres días seguidos. Si veo que en casi una semana, las molestias persisten en mi garganta, voy al médico.
He probado las de menta y las de miel y limón. Me quedo con estas últimas. Las de menta tienen un sabor demasiado fuerte para mi gusto. En cambio, las de sabor miel y limón tienen un sabor original, más suave que te valen muy bien para aliviar esas molestias de garganta que no te dejan vivir.
La única desventaja que les encuentro es su precio. Me parecen caras, como os he dicho, pero vale la pena comprarlas porque las puedes adquirir sin receta médica y así te arreglas un problemilla en la garganta sin ir al médico.
Las de menta como que las encontraba muy fuertes en sabor. Las compro a veces porque le gustan a mi madre.
Las Strepsils las venden en cajas de 24 pastillas. Si tomas las ocho que te recomiendan como dosis máxima al día, poco te cunde la caja. Yo nunca tomo tantas. Con tres o cuatro tengo suficiente para aliviar unas molestias de garganta leves.
De precio no salen muy baratas, más bien nada baratas. La última caja que compré me costó 4,95 euros.
Os recomiendo las pastillas de chupar Strepsils porque son realmente efectivas para aliviar un dolor de garganta que está empezando. Yo nunca las he tomado más de dos o tres días seguidos. Si veo que en casi una semana, las molestias persisten en mi garganta, voy al médico.
He probado las de menta y las de miel y limón. Me quedo con estas últimas. Las de menta tienen un sabor demasiado fuerte para mi gusto. En cambio, las de sabor miel y limón tienen un sabor original, más suave que te valen muy bien para aliviar esas molestias de garganta que no te dejan vivir.
La única desventaja que les encuentro es su precio. Me parecen caras, como os he dicho, pero vale la pena comprarlas porque las puedes adquirir sin receta médica y así te arreglas un problemilla en la garganta sin ir al médico.
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