LO MEJOR DE BERUBY

REGALOS PERSONALIZADOS

domingo, 10 de abril de 2016

Mis compras para mi familia deportista

1

Hay snacks que intentan venderlos diciendo que son más sanos que otros. Yo no me lo creo, pero acabo comprando los que tienen menos grasa. Tal es el caso de los Natuchips Grefusa. Dicen en su envase que tienen un 70% menos de grasa. 

No son caros. Los venden a 1,30 euros la bolsa de 85 gramos. Tampoco es que sean baratitos, pero, una siempre espera que un producto nuevo sea más caro. Estos Natuchips Grefusa incluso los puedes encontrar de oferta. Yo los compré el otro día en el Carrefour a 0.65 euros la segunda unidad. Aproveché para comprar las cuatro variedades. 

En mi casa gustan mucho los de barbacoa, los que tienen la bolsa de color rosa fuerte. Saben a barbacoa de verdad. Los que no me gustan nada son los de queso y especias. Es como si metieras en la boca el contenido de un tarro de cominos de esos que se le echan a los callos. Ni siquiera el queso le resta sabor a especias. 

También los venden de aceite de oliva con sal marina y de tomate, queso y orégano. Estos últimos los comercializan en bolsas de color verde muy llamativas. Muchas veces los compro más por el envase que por el contenido. 

Os los recomiendo. Los Natuchips Grefusa no son otras cosas que las patatas fritas de toda la vida con cereales y soja. Son unas patatas fritas enriquecidas, como dice mi madre. Los encuentras a vender en muchos supermercados y grandes superficies. 

Para las niñas compro siempre los de aceite de oliva con sal marina. Están menos salados que los de barbacoa que nos gustan a nosotros. En todo caso, no se debe abusar de su consumo, y menos los niños. Los snacks nunca son saludables. 

Los Natuchips Grefusa son ideales para picotear cuando estás viendo la tele. Te quitan bastante el hambre. Es una pena que las bolsas no sean más grandes. Sólo traen 85 gramos.

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2

La Silla de auto Nico es una silla muy segura para llevar los niños bien sujetos en el coche. Te vale para niños de 9 a 36 kilos. A mí me vale para mis dos pitufas. 

Compré dos. Las dos en color rosa. MI chico quería comprarlas en colores distintos, pero yo no quiero guerras en el coche por sentarse en una o en otro. Así, como son iguales, no hay discusiones. 

Las venden en colores rosa, rojo y gris. Las grises no me gustaban nada. Las rojas eran bonitas, pero, como las niñas tienen tantas cosas de color rojo, quería cambiar. 

Esta silla cuenta con arnés en cinco puntos. Los críos van muy seguros. Es casi imposible que se te desaten por muy trastos que sean. Tienen una colchoneta reductora, lo cual les aporta mucha comodidad para sus traseros. 

Os la recomiendo. La Silla de auto Nico es desenfundable y lavable. Yo le lavo las fundas todas las semanas. Al ser de color rosa enseguida se ven sobadas. Hay que lavarlas con cierta frecuencia. 

No es una silla cara. Me costó 53 euros. La he visto a vender más cara. Por 106 euros compré las dos Sillas de auto Nico. Las volvería a comprar porque me han salido resistentes y son muy fáciles de colocar en el asiento trasero del coche. De esto se encarga mi marido. A él como no le compres las cosas fáciles de instalar, no te las coloca. 

Lo que es la estructura de la silla está fabricada en PEHD (entiéndase polietileno alta densidad). La parte textil tiene un exterior cien por cien poliester y el relleno es de poliuretano. 

Sus medidas son de 47 x 50 x 68 cm. No es que sean inmensas, pero llegan de sobra para que un crío de peso normal vaya cómodo. Mis hijas nunca se me han quejado por estrecheces de espacio.

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3

Los cascos plegables Closca están pensados para ciclistas urbanos. Los puedes plegar, guardar en el bolso y quitar para poner cuando los necesitas. 

A mí me regaló uno mi marido. Pocas veces voy en bicicleta, pero me viene bien para cuando bajo al parque con las niñas y tomo una bicicleta de alquiler para darles una vuelta de una en una. Al final, el casco se lo pongo a ellas. Por eso estoy pensando en comprar otro. 

Hay que pensarlo porque son caros. Uno de estos cascos te sale en unos cien euros. Te lo venden con tres fundas que te valen para combinar con la ropa que llevas. Yo hubiera referido que me quitaran del pack las fundas y me dejaran el casco tal cual. Me saldría más barato. El casco solo cuesta 65 euros. Las fundas incrementan bastante el precio de este casco plegable que se vende también en Estados Unidos y en Canadá. Aquí en España sólo lo puedes comprar online. No tienen tiendas físicas que lo comercialicen. 

Mi chico dice que estos cascos Closca son de chica. Yo no los veo muy de chica. Lo que sí los veo es poco seguros. Me parecen frágiles. Tienen un diseño que es bastante mejorable en seguridad. Los despliegas y los ves como una visera. 

El mío casi siempre va con la funda roja. Tengo una funda a cuadros horrible y de la funda negra mejor no hablo porque lo deja como esos cascos que se ponen los jinetes que van en caballos de carreras. La ventaja de la funda negra es que es impermeable. 

Os los recomiendo. Los cascos Closca se están vendiendo mucho, sobre todo para regalar. De momento, no tienen mucha competencia. Es difícil encontrar un casco para ciclistas y usuarios de skateboard y patines que sean plegables. 

Sólo los venden en dos tallas: la L y la M. Todavía no los fabrican para niños. Esto no quiere decir que no se los puedas poner. Mejor con un casco flojo que sin casco.

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4

El Chaquetón Norfolk es un chaquetón muy británico para hombres de más de cuarenta años. No es nada juvenil. Mi chico compró uno y le queda horrible. Le pone años. Por eso no me gusta que se lo ponga. Eso de ser la esposa de un viejo no me va. 

Es de la firma Heartland, una marca con mucho renombre en ropa para hombres. Pero, pese a la marca, no tiene un precio muy prohibitivo. A mi chico le salió en 240 euros. No me parece caro teniendo en cuenta lo duradero que le ha salido. Lleva varios años en su armario y está como el día en que lo compró. 

En su interior tiene un chaleco reversible y desmontable. Mi chico alguna vez lleva sólo el chaleco. Todavía le queda peor. Si con el chaquetón parece un señor de sesenta años, con el chaleco parece un anciano que ha escapado de una residencia de la tercera edad. 

Lo bueno que tiene este chaquetón es que lo puedes adaptar a los cambios de temperatura. Tiene un cuello de pana suave que se cierra y queda como una bufanda. Te ahorras llevar bufanda cuando hace frío. 

Bolsillos no le faltan. Además de los bolsillos exteriores, cuenta con bolsillos ocultos para la cartera y el móvil. Por eso le gusta tanto a mi chico. Me dice siempre que el Chaquetón Norfolk es ideal para ir de viaje, sobre todo a sitios donde abundan los carteristas. Es casi imposible que te roben la cartera que guardas en el bolsillo oculto del chaquetón. 

Pese a que no me gusta os lo recomiendo. Es un chaquetón de corte clásico que no pasa de moda. Justo por eso me parece más propio de hombres mayores. Un veinteañero con este chaquetón iría como disfrazado. Es una pena que no modernicen un poco el diseño del Chaquetón Norfolk. Seguro que lo venderían mucho mejor entre hombres menores de cuarenta años.



PRUEBA PRIMERO, PAGA DESPUÉS